Histórico, no hay otra palabra para definir el concierto que pudimos ver ayer. Los Barricada volvían a Tanos, 20 años después para hacer lo que nunca pudieron, para dejar patente que se acordaban de aquella vez y que a pesar de sentirlo mucho ellos no tuvieron la culpa, que fue la lluvia, la principal ausente ayer, la que no les permitió hacer lo que más los gusta.
Como los que os guste Baricada sabréis, el año pasado han sacado un disco, "La Tierra Está Sorda", cuyo eje central es la Guerra Civil Española y todas sus canciones tocan temas e historias que sucedieron en esta época. Dándole vueltas y vuelta desde hace mucho he llegado a la conclusión de que es el
La primera parte del concierto consistió en tocar íntegro su nuevo trabajo. Casi todas las canciones tienen una historia detrás, no están vacías de contenido y además están documentadas, por ello el Drogas nos las introdujo con unas palabras que contaban a grandes rasgos lo que cuentan las canciones o la historia de las personas que hay detrás.
Desde el inicio con "Desfilan" hasta el final con "Una lágrima en el suelo" los Barri desgranaron su nuevo trabajo de una forma sublime, emotiva y con un juego de luces sin color, como para enfatizar el blanco y negro de las imágenes de la época.
No pasó desapercibida la colaboración de Iker Piedrafita (de los Dikers) que está girando con ellos y que toca la guitarra, bajo, pianos... y al que el público le dedicó un caluroso aplauso muy bien merecido cuando lo presentó el Drogas, ya en la parte final.
De entre las canciones que sonaron en la parte inicial destacaron: "22 de Mayo", sobre la fuga del Penal de Ezkaba, en la que mataron 207 presos y sólo 3 consiguienron escapar; "Pétalos" de una de las 13 rosas; "La estancia", de las celdas de las prisiones; "Suela de alpargata" de los que se echaron al monte; y "Las siete de la tarde" sobre una madre que da a luz en un campo de concentración sin que se enteren los captores.
Especialmente emotiva fue la canción de cierre, "Una lágrima en el suelo" que trata de los que tuvieron que dejas atrás el país y toda su vida y exiliarse. En esta la gente coreó toda la letra.
Mientras que preparaban el escenario para la segunda parte la gente esperaba impaciente lo que iba a llegar, las canciones, los clásicos que han marcado la carrera de Barricada.
Esta segunda parte fue más colorida, menos intimista y más brutal (más acorde con los acontecimientos de hace 20 años...), y los sirvió para quitarse definitivamente la espina que tenían clvada. En ella pudimos disfrutar de canciones míticas como: "Todos mirando", "Oveja negra", "Esta es una noche de Rock and Roll", "No hay tregua", "Okupación" o la que pedía todo el mundo "Esta noche", que se prolongó un par de minutos con el bateras y el coro del público en exclusiva.
Tras un pequeño parón, en que la gente seguía animada y pedía encarecidamente un bis volvieron a salir los de Pamplona para tocar "La silla eléctrica". Parece ser que este aparato consume mucha electricidad, porque en un momento dado se fue el sonido por un problema eléctrico y la banda siguió haciendo una versión acústica con los instrumentos eleéctricos (vamos que solo se oía la batería), pero tras unos minutos que solucionaron el problema terminaron de tocar normalmente la canción.
Recapitulando, lo que tuvimos ayer fue un conciertazo de casi casi 3 horas en el que hubo tiempo de novedades y clásicos que sirvió para redimir el daño que hizo la lluvia hace 20 años. Además, pese a la poca publicidad que hubo, la campa de tanos se llenó hasta la bandera. Y menos mal que no nos llovió está vez.
Muchas fotos más, como siempre, pinchando aquí.
Guapas fotos! Y aunq yo no pude ir (ya podré) me dijeron q el Ibi también estubo a la batera! ;)
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