I JUST WASN'T MADE FOR THESE TIMES
A mediados de los 60, la situación de los Beach Boys era, cuando menos, peliaguda. Su principal compositor se dabatía con sus demonios internos de auto-realización musical. Su mercado musical se había visto francamente invadido por la nueva ola de grupos británicos (principalmente los cuatro de Liverpool), y, aunque con una popularidad todavía más que considerable, su estilo se descubría infantil y extremadamente "popero" (si es que eso es algo malo) por carecer de la profundidad letrística y la experimentación en el estudio que empezaba a aparecer, y que acabaría por definir la música de la década.
Nacidos a principios de los 60 en el seno de la familia Wilson ( tres hermanos, Brian, Carl y Dennis, su primo Mike Love, y un colega de colegio de Brian, Al Jardine), los Beach Boys fueron sin duda el grupo de mayor éxito en Estados Unidos en la era pre-Beatles. Sus impecables melodías corales, influenciadas en un primer momento por grupos como The Four Freshmen, su apariencia conjuntada (uniformada), y la temática de las letras (surf, amor adolescente, playas soleadas, más surf, California, más amor adolescente, más playas soleadas, ....) les catapultaron al éxito.
Sin embargo no todo dura para siempre, y todo evoluciona. Por un lado, los Beatles llegan de repente, con I Want to Hold Your Hand bajo el brazo, y revolucionan al país entero (después de esto, ocuparían durante semanas las cinco primeras posiciones de las listas de éxitos simultáneamente con sus singles). Por otro, Bob Dylan y sus profundas letras metafóricas empiezan a calar, a ambos lados del Atlántico. Cuando digo esto, me refiero a que los Beatles estuvieron increíblemente influenciados por Dylan a la hora de evolucionar con sus letras, y en consecuancia con su música.
Los Beach Boys siguieron con su propia dinámica de singles sin mayor pretensión artística que la de mantener su franja de mercado, y consiguiéndolo en cierta medida (de esta época es I Get Around, temazo donde los haya)
Aún así, Brian Wilson está ya de los nervios (literalmente). Se siente infravalorado como compositor y como intérprete. Cabe decir que el amigo Wilson era un prodigio musical, multi-instrumentista, entendido intérprete de jazz (muy influenciado por los Gershwin) y cerebro del grupo. Claro que todo esto queda eclipsado cuando su primo Mike Love se pone a bailar como lo hace en el video anterior ( hacia el 00:58, no os lo perdáis). ¿Quién iba a darse cuanta de todo lo que el grupo podía dar de sí? Comenzó una epoca de depresión muy marcada. Su repentino pánico a volar y su falta de motivación hicieron que dejara las giras para concentrarse en la composición, por lo que la banda tuvo que buscar un nuevo bajista para el directo (primero el mítico Glen Campbell y luego Bruce Johnston).
La gota que colmó el vaso y que precipitó la genialidad fué la publicación de la versión americana de Rubber Soul. Tras escucharlo, Wilson se dijo "eso es lo que quiero hacer". Se refería a un disco compacto (no un CD), con una atmósfera común, una temática más profunda, en el que todas las canciones, por sí mismas, significaban algo (en lugar de lo que era normalmente, dos o tres singles con caras B de relleno).
Con todo este telón de fondo, Brian Wilson se encierra, y comienza a componer. Con sus compañeros de grupo realizando una gira por Asia ,reunió en el estudio a un montón de músicos de estudio (la mayoría de los que se acabarían auto-denominando The Wrecking Crew, una serie de músicos de sesión que aparecen virtualmente en todos los discos americanos de los 60) y grabó toda la música del disco. Wilson les entregaba partituras de la pieza que iban a tocar, aunque a menudo iba realizando cambios e improvisaciones sobre la marcha.
Todo esto no era más que la lucha interna de Brian Wilson por demostrar que había algo más que podía dar, de ganarse un respeto como compositor. Al producir utilizó las enseñanzas de otra de sus grandes influencias. El muro de sonido de Phil Spector le vino de perlas para dar consistencia a la grabación. Por eso la lista de músicos es tan larga. Y es que para hacer un buen Wall of Sound lo que te hace falta son instrumentos a cascoporro.... Además, en la grabación experimentó con todo lo que tenía a mano: ladridos de perro, bocinas de coche, timbres de bicicleta. Aunque suene a la típica mezcolanza de sonidos de los sesenta, todo esto era completamente nuevo. El resultado fue impresionante. Este es uno de los dos cortes instrumentales del disco.
Por otra parte, las letras ya habían sido escritas por Tony Asher. En ellas refleja el mundo interior de Brian Wilson: sus miedos e inseguridades (That's Not Me), su falta de conexión con el mundo exterior (I Just Wasn't Made For These Times), su relación con su esposa (You Still Believe In Me, God Only Knows, ...).
Una vez acabada la gira, el resto del conjunto regresó a California. Wilson les recibió con todo el disco grabado, a falta solo de que metieran las voces. La sofisticación musical les pareció demasiado elevada, y la temática de las letras, introspectiva y reflexiva, chocaba mucho con su estilo anterior. Por estos motivos la reacción a la escucha fue un poco reticente, sobre todo por parte de Mike Love. Finalmente, Wilson les convenció con la excusa de que sólo era un disco, y que si fallaba siempre podían volver a su estilo clásico de chicas y playa.
De esta manera se publicó el album. Con gran expectación por parte del compositor principal, y escepticismo por la del resto del grupo, el disco salió en mayo de 1966 en Estados Unidos. Y no cuajó. Al menos no como debía. Llegó al nº10 de las listas, lo que deprimió a Wilson profundamente. Había apostado por algo y no había dado resultado. Ahora sólo quedaba volver a lo de antes y seguir produciendo singles pegadizos.
Alrededor de la época en que se publicó el album, Bruce Johnston fué a Inglaterra a pasar un tiempo. Allí trabó bastante amistad con Keith Moon. Le mostró el álbum. Moon flipó. Era otra cosa. Junto a él, Johnston acudió a los garitos de moda que la crema de la música británica frecuentaba. Allí conoció al resto de The Who, a Cream, ... en fin, a todo el mogollón de astros. Y a todos ellos les puso el disco, para enseñarles lo último que habían grabado los Beach Boys. La gente se quedaba pasmada. Es difícil encontrar a alguien de este periodo que no mencione alguna vez la primera oída que le pegó al disco. Sonidos nuevos, estructuras complejas, cohesión, ... Vamos, que la gente se puso de rodillas ante el album a la primera.
Y no tardó en correr la voz. Al poco, Lennon y McCartney llamaron a Johnston para que les dejara escuchar eso de lo que todo el mundo hablaba. Lo escucharon dos veces del tirón, sin decir nada. Luego se levantaron y se fueron. Se quedaron obsesionados con él. Cuando lo consiguieron, lo escuchaban una y otra vez. McCartney ha admitido muchísimas veces el enorme impacto que tuvo sobre ellos el disco, hasta el punto de comprarles una copia a cada uno de sus hijos para que les sirva como guía en su vida. Guía de lo que alguien puede conseguir cuando se lo propone, y de enseñanza en la introspección de sus letras. Además siempre menciona God Only Knows como su canción favorita.
Tras esto, The Beatles sacaron Revolver, un paso más, y después Sgt. Pepper's, ambos claramente influenciados por Pet Sounds, cerrando el ciclo de discos que llevó la música popular a otro nivel. El propio George Martin ha admitido que Sgt. Pepper's fue un intento de igualar Pet Sounds.
Finalmente se reconoció el valor de Brian Wilson, y el entorno musical a la cabeza (el británico) no dejó de alabar su hazaña. Desde entonces ha sido nombrado mejor disco de todos los tiempos en innumerables ocasiones, ampliamente reconocido como uno de los más influyentes. Sin embargo, y a pesar de este reconocimiento, Brian Wilson no mejoró en su "paranoia". En el mismo espíritu que Pet Sounds grabó Good Vibrations, single anticipado de lo que sería su siguiente disco, el esperado Smile!. Pues bien, el disco nunca llegó a terminarse, y Wilson dejó los Beach Boys. Eventualmente hizo colaboraciones, pero básicamente estuvo 10 ó 15 años yendo y viniendo entre problemas de salud mental y problemas con las drogas. Vamos, lo típico de un músico de primera línea de la época.
Antes de terminar, que sepáis que Smile! se terminó, y se publicó en el 2004. Es decir, 37 años después de lo previsto. Me río yo de Chinese Democracy..........
Disfrutad del disco!!
BRAVO!!! Genial reseña! Toda una clase de historia. La verdad que es un discazo en toda regla, sabía que era importante, pero no tanto!!!
ResponderEliminarMe encanta. Los Beach Boys son uno de los grupos de los que siempre que escucho canciones sueltas me encantan, pero nunca he escuchado un disco entero suyo (fuera de los grandes éxitos). Esta es la oportunidad!
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